Cómplice

Cómplice, cómplice de tu sonrisa, la cuál me mantienes con total soltura,
estoy a un solo paso de la locura, pierdo la cordura al ver como suspiras, rehaces el aire, mantienes intacto el transcurso del tiempo, y mientras hieres mi mente, cada palabra tuya se desvía hasta desaparecer dentro de mi cabeza, y aún siendo cómplice de tu mirada, no te atreves a mantenerla más de dos segundos, y tan sólo necesito tres para enamorarte, y por más que intente desviarte hacia mi vida, pareces evitarlo, cómo yo parezco evitar tus labios, solo por no quedarme preso de ese beso.
Te ofrezco realmente un mundo, en el que todo es fantasía, dónde el misterio lidera y la inteligencia abunda. Te ofrezco mis dudas para que me las resuelvas, para así yo resolver las tuyas, te ofrezco un mundo de encanto, dónde cada palabra tiene segundas intenciones, en cuanto a la belleza natural, cualquier ideal se disipa. Te regalo mi vida, y tu todavía no te has enterado, me tienes desesperado al verte posible, cuando haces lo imposible para que no me empareje con tu mente para danzar entre sueños.

Los sueños son mi medicina

Acumulado el cansancio, ya mi mente se ahoga en torrentes de ideas, y ninguna parece acabar en una misma desembocadura; un vaivén de sensaciones aparecen y ninguna parece residir en mi cabeza por más de unos breves segundos. La única manera de ordenar tal ajetreo es esperar a que esta noche, el mundo de los sueños, me recomponga.

Usted, hombre que vive de sueños,
que atraviesa laberintos de nubes y siempre encuentra salida.
¿Cómo lo consigue?
¿Acaso logra que su imaginación ignore a la vida?

Usted, hombre que vive de sueños,
producto de nuestras preocupaciones, y protagonista de nuestras sonrisas.
¿Cómo lo hace?
¿Acaso deshace por la noche, lo hecho en el día?

Agradezco el poder vivir durante el día, pero agradezco aún más, que la única forma de descansar mi mente sea soñando, dónde se renuevan mis ilusiones, se barnizan mis esperanzas, y se disipan mis preocupaciones.

Los sueños son mi medicina.

El abuelo de 21 años

¿Acaso el expresarse profundamente, sin barrera alguna, es síntoma de hacerse viejo? ¿Se ha de frenar a los impulsos para volver a ser joven? Sinceramente, no entiendo nada... Hoy me han comparado con un abuelo, ¡con tan sólo 21 años!

Entonces mi pregunta es ¿como debe pensar una persona, digamos estándar y de mi misma edad, para hacer este símil? ¿Qué puedo transmitir para que alguien me ponga 40 años más de experiencia, 40 años más de ideas, de circunstancias, de pensamientos, de conflictos..? No negaré tener curiosidad por lo que pueda ser en mi futuro, pues me siento como si hubieran saltado una parte de mi vida que aún no he vivido...

Nunca sabré lo que transmito a los demás, a no ser que alguien tenga la seguridad en describirme. Y ojalá venga esa persona, porque hasta el momento nadie se va a atrever, si cada cosa que digo parece cohibirles, parece entrarles una sensación de impotencia, y la resuelven con alguna coletilla, todas éstas, siempre hermanadas con la filosofía o con ser "rayado". Y todo lo que podéis leer, sin duda no tiene nada que ver con ser un rayado, puesto que el pensar, reflexionar, dar rienda suelta a determinados pensamientos, a expresarse directamente con todas las herramientas que nos son disponibles, hacen, justamente que no me raye.

No estoy ofendido, ni mucho menos, pues si así me ve el mundo, estoy orgulloso de ser un abuelo, ¡con tan sólo 21 años!

¡Qué día mas bonito!

Nubes temerosas, lluvia chispeante y que amenaza con dar mas de sí, temperaturas bajas que se baten con nuestro calor corporal, viento helado que nos golpea desde la dirección que le place... por favor.. ¡Qué dia más bonito!

Hoy las ráfagas de viento parecían susurrar palabras, el frío que se colaba entre los pequeños huecos de nuestras ropas y cada gota de lluvia que chocaba con nuestro rostro ¡nos hacía sentir vivos! Y como no vamos a sentirnos vivos, si el sentido del tacto está continuamente estimulado; y como no vamos a ponernos melancólicos, si hasta el silencio parecía hablar...

Hoy los árboles parecían suspirar, hoy todo parecía tener vida, hoy al mundo no parecía asustarle reflexionar, y como vamos a actuar igual que ayer, si nada en este mundo es perfectamente constante.

Hoy, a mi juicio... ha sido un día precioso

Despierta...

Despierta… que ya ha empezado el día…

Despertarse y no saber como va a transcurrir el día, saber que el primer saludo que haga al cruzarme con alguien, su expresión al verme me va a dar ciertas pistas para saberlo; quizá esa expresión sea simpática, amena, tranquilizante, o bien, ignorante, desconfiada, contrariada… extraña sensación sabiendo que al fin y al cabo soy siempre el mismo.
Ya no me rayo, si veo que no me tratan igual que el día anterior, se que al día siguiente me trataran de diferente manera, por ello he aprendido a despreocuparme, empiezo a valorar que pocas personas en vez de rutina diaria, su diario es una caja de sorpresas, la cual no hace falta ni abrirla, van saliendo por si solas… me puedo sentir afortunado de formar parte de ese pequeño grupo de personas.
Girar la cara es síntoma o bien de prepotencia, o bien de miedo, ninguna de las dos las comparto, pues valoro la humildad, y la seguridad en uno mismo, aconsejo las ultimas actitudes, no se te podrá recriminar nada, pues si de algo no se puede tachar a alguien es de ser agradable, y en cambio tarde o temprano, recibirás la misma confianza o mas, me remito a dos frases hechas: a cada uno se le da lo que se le debe, y no tienes nada que perder.
Mi conclusión y a la vez permitidme utilizarla como consejo, es que al levantarte, levanta una sonrisa, sonríe a la vida,( es una forma de valorarla), canta en la ducha, arréglate una única vez delante del espejo, y no te mires mas en espejos a lo largo del día, pues es la única forma de que se olviden de tu estética y se fijen en tus palabras, aconsejo así también que el primer saludo, no lo evites, ni gires la cara, se humilde y seguro, y entonces ya tendrás una base que nadie te va a quitar, que por muy mal que te haya ido el día, al anochecer podrás decir que al menos te has levantado sonriendo, has cantado en la ducha, y podrás decir también que mañana volverás a desafiar a la vida, (bajo mi punto de vista, no hay mejor expresión de desafío que una buena sonrisa)
que por muchos obstáculos, malas caras y actitudes incomprensibles, habrás pasado unos momentos en que, porque tu has querido, has sido feliz.... como diría mi encantadora abuela “ya pueden hacer o decir lo que quieran, ya puede pasar lo que sea, que voy a ser feliz igualmente”.

¡Bienvenidos a mi refugio!

Bienvenidos a este nuevo refugio.

Incentivado por mis tremendas ganas de transmitir, potenciado por la necesidad que tengo de dar mi punto de vista de este mundo y estimulado, finalmente, por las caricias en palabras, de una princesa, al más puro estilo de los cuentos, y a la que me empeño llamarle "Chica Misterio"; he decidido crear este blog, primero para desahogar mi mente, de ya por sí saturada; segundo, para compartirlo con otro tipo de "personas realistas", y tercero, para explicarle al mundo que todavía quedan sujetos, que piensan en el bien común, más que en sí mismos; que luchan por sus objetivos, y que, sobretodo, son fieles y comprometidos a su palabra (Único medio de expresión al que todo el mundo responde; ya os comentaré, futuramente, expresiones como la mirada, sonrisa, gestos, movimientos, que también son medios de expresión, pero que, sin embargo, no mucha gente es capaz de descifrar).

De momento, es una incógnita saber cuál será su contenido. Conociéndome, seguramente, daré pinceladas al mundo de la mente, sobre sus posibles limitaciones o sus falsas fronteras, sobre el mundo de la expresión, etc... Pero auguro también sorpresas en ámbitos sentimentales, como el amor, amistad y demás. ¿Qúién sabe? Todo dependerá de mi estado de ánimo, vivencias y discrepancias.

Me despido, con una grata esperanza, acompañada de una sincera sonrisa. Un abrazo cordial.